Escritor peruano Alfredo Bryce Echenique es sancionado por Indecopi

Indecopi sancionó al conocido escritor peruano Alfredo Bryce Echenique, ganador del premio Planeta en el 2002 por su novela "El huerto de mi amada", con 50 UIT por el plagio de diversos artículos difundidos en publicaciones nacionales y extranjeras. Este tema es propicio para realizar un breve resumen de los derechos de autor y su inserción dentro de los derechos
de propiedad intelectual, así como los mecanismos previstos por las leyes nacionales e instrumentos multilaterales para su protección.

En este caso, se demostró, en primera instancia administrativa, que el escritor plagió 16 artículos de 15 autores, publicados en la revista Quehacer, los diarios La Vanguardia y Periódico de Extremadura de España, y la revista Jano de España y México.

En su defensa, afirmó que las obras cuestionadas por plagio no habían sido publicadas en el Perú, por lo que no se podía pretender la protección de las obras en el país; y, que la publicación fue sin su autorización.

Surge la pregunta, entonces, ¿cómo un autor que desde hace muchos años reside y publica fuera del Perú, que a su vez plagió algunas obras publicadas en el extranjero, puede ser sancionado en el país por tales hechos? Para el especialista Alfonso Fernández Maldonado, la respuesta está en la universalidad de los derechos de autor, aspecto que los diferencia de los derechos de propiedad industrial, como las marcas.

Según la legislación vigente, dijo, los derechos autor se rigen por el principio de universalidad, es decir su reconocimiento se da por la simple declaración de una persona como creador de una obra. Así, se otorga a los titulares de obras, cualquiera sea su nacionalidad o domicilio, un trato nacional. Igual, las obras publicadas en el extranjero tienen la misma protección otorgada a los nacionales del país donde se publican.

Este principio es opuesto al de territorialidad de derechos de propiedad industrial, cuyo reconocimiento y protección se da luego de su registro en el país, salvo excepciones por notoriedad o mala fe, explica el especialista en derecho comercial y de la competencia, quien además es miembro del Estudio Avendaño.

"El autor goza de derechos perpetuos, inalienables, inembargables, irrenunciables e imprescriptibles sobre la obra, los cuales se conocen como "derechos morales", correspondientes a los derechos de divulgación, paternidad, integridad, modificación o variación, así como los de acceso y retiro de la obra del conocimiento de terceros", afirmó.

Textos plagiados

Los textos plagiados, o copiados ilegalmente, son los siguientes: "Potencias sin poder", de Oswaldo de Rivero (Quehacer, Perú, mayo 2005), "Uso social del tabaco", de Eulalia Solé (La Vanguardia, España, julio de 2005), "La leyenda de John Lennon genera cerca de 19 millones de euros al año", de Nacho Para (Periódico de Extremadura, España, diciembre de 2005), "Londres busca detectives", de Carlos Sentís (La Vanguardia, España, julio de 2005), "La estupidez perjudica seriamente la salud", de Jordi Cebrià Andreu y Víctor Cabrè Segarra (Revista Jano, España, octubre de 2005).

Asimismo, "Estrellas médicas", de Sergi Pámies (Revista Jano, España, abril de 2004), "La angustia de Kafka", de Juan Carlos Ponce (Revista Jano, España, octubre de 2001), "John Steinbeck, un novelista de los oprimidos", de Juan Carlos Ponce (Revista Jano, España, marzo de 2002), "John Ford, la épica del Western", de Blas Gil Extremera (Revista Jano, España, mayo de 2005), "William Blake y los proverbios del infierno", de Jorge de la Paz (Revista ANUIES, México, julio de 1986), "El psicoanálisis de Woody Allen", de Benjamín Herreros (Revista Jano, México, marzo de 2002), "Cultura y civilizaciones", de Cristóbal Pera (Revista Jano, octubre de 2005), "La enfermedad de la nostalgia", de Luis M. Iruela (Revista Jano, México, octubre de 2005), "La nueva amenaza nuclear", de Oswaldo de Rivero (Página web www.contexto.org, mayo de 2005), "Ségolène, de corazón, de Francesc-Marc Alvaro (La Vanguardia, España, noviembre de 2006), y "Cómo combatir el terrorismo", de Joseph María Puigjaner (Diario La Vanguardia, España, julio de 2005).

Esta no es la primera vez.

Esta no es la primera vez que Alfredo Bryce Echenique pasa por esta situación, ya fue denunciado anteriormente ante el INDECOPI por presunto plagio en agravio del escritor Herbert Morote Rebolledo. Sin embargo, en dicho caso, Bryce no fue sancionado al no contarse con pruebas suficientes que corroboren la supuesta infracción.